La Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) ha intensificado su batalla legal, apelando la decisión de un tribunal federal en su polémico caso contra Ripple Labs. La SEC sostiene que el Tribunal de Distrito de Nueva York se equivocó al dictaminar que las ventas de XRP a inversores minoristas no constituían una oferta de valores no registrados.

El 15 de enero, la agencia presentó una apelación ante la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito para revertir la decisión de la jueza Analisa Torres de julio de 2023, buscando que las ventas de XRP a inversores minoristas sean reclasificadas como valores no registrados.

La SEC también argumenta que la distribución de XRP como compensación para empleados y en transacciones comerciales fue incorrectamente excluida de esta clasificación.

Esta apelación continúa la búsqueda de la SEC tras una derrota parcial en su demanda en curso contra Ripple, iniciada en diciembre de 2020. La jueza Torres había determinado previamente que, si bien las ventas de XRP a inversores institucionales calificaban como valores, las ventas a inversores minoristas a través de intercambios no lo hacían, debido a la falta de conocimiento sobre los vendedores entre estos inversores minoristas.

La SEC insiste en que los compradores de XRP anticiparon ganancias debido a las actividades promocionales de Ripple, categorizando a XRP como un contrato de inversión bajo la prueba de Howey, un argumento estándar que la comisión ha utilizado contra múltiples firmas de criptomonedas.

El liderazgo de Ripple sigue siendo crítico con las acciones de la SEC. El CEO Brad Garlinghouse, a través de una publicación en redes sociales del 15 de enero, acusó a la SEC de reiterar argumentos fallidos, sugiriendo que estos esfuerzos probablemente serán archivados por la próxima administración. El director legal de Ripple, Stuart Alderoty, coincidió con estos pensamientos, previendo la apelación de la SEC como una repetición ineficaz.

El abogado pro-cripto Jeremy Hogan expresó escepticismo sobre el enfoque de la SEC, sugiriendo que el caso podría no llegar a un fallo. Criticó el escrito de la SEC, señalando la falta de evidencia que demuestre que los inversores minoristas estaban al tanto de las intenciones o "promesas" de Ripple.

Ripple ahora tiene la oportunidad de presentar sus contraargumentos por escrito, con la posibilidad de audiencias orales antes de que se tome una decisión judicial. Se espera que el proceso de apelación se prolongue varios meses.

Paralelamente, Ripple ha contraapelado el éxito parcial de la SEC en el tribunal inferior de Nueva York, impugnando la orden de pagar una multa civil de 125 millones de dólares por sus pérdidas.

En medio de estas batallas legales, XRP ha experimentado un aumento del 10% en su precio en las últimas 24 horas, parte de un aumento más amplio en el mercado de criptomonedas.