Ethereum, la segunda criptomoneda más grande por capitalización de mercado, está navegando en aguas turbulentas. Los recientes métricas en la cadena revelan un mercado que lidia con la incertidumbre. Los flujos de intercambio y el comportamiento de las ballenas pintan un cuadro complejo del sentimiento del inversor.
En el último mes, el volumen neto de transferencias de Ethereum hacia y desde los intercambios ha mostrado una volatilidad significativa. El 19 de septiembre, las entradas alcanzaron un pico de 140,000 ETH. Este aumento sugirió una presión de venta incrementada. Sin embargo, semanas posteriores observaron volúmenes considerablemente más bajos.
A mediados de septiembre y principios de octubre se vieron flujos de salida notables. Grandes cantidades de ETH se movieron fuera de los intercambios durante estos períodos. Tales movimientos típicamente indican una preferencia por mantener a largo plazo sobre vender inmediatamente. Aún así, también ocurrieron entradas sustanciales. Un influjo significativo se observó el 12 de septiembre y estas señales conflictivas contribuyen a la incertidumbre general del mercado.
La métrica que rastrea el movimiento de ETH entre intercambios y billeteras individuales proporciona una visión valiosa. Flujos netos positivos sugieren un sentimiento bajista, mientras que flujos negativos indican optimismo. Del 7 al 9 de octubre, los flujos netos permanecieron positivos durante tres días consecutivos. Esta tendencia se revirtió el 10 de octubre, con 19,000 ETH saliendo de los intercambios.
La actividad de las ballenas también ha mostrado signos de vacilación. El número de direcciones que mantienen al menos 1,000 ETH disminuyó significativamente desde finales de septiembre hasta principios de octubre. El 9 de octubre, esta cifra alcanzó un mínimo mensual de 5,590 direcciones.
Esta retirada de los principales actores sugiere una falta de confianza en las perspectivas a corto plazo de ETH. El comportamiento de las ballenas a menudo precede a cambios más amplios del mercado debido a su influencia sustancial de capital. Un ligero repunte se produjo entre el 9 y el 10 de octubre, con el conteo aumentando a 5,598 direcciones de ballenas. Sin embargo, esto sigue estando muy por debajo de los niveles vistos en semanas anteriores, y los datos sugieren que las ballenas aún no han recuperado plenamente la confianza en un repunte de precios.
Los indicadores técnicos presentan una perspectiva mixta. Las líneas de la Media Móvil Exponencial (EMA) de Ethereum actualmente muestran una tendencia bajista. Las EMAs a corto plazo se sitúan por debajo de las de largo plazo. Sin embargo, una EMA a corto plazo ha comenzado recientemente a moverse hacia arriba. Si bien este ligero cambio insinúa una posible reversión de tendencia, es demasiado pronto para determinar si marca el comienzo de una tendencia alcista sostenible. El mercado sigue en un estado de cambio, con los inversores observando de cerca en busca de señales más claras.