Michael Saylor, cofundador de MicroStrategy, tiene una idea loca. Cree que Tío Sam debería ser el mayor Bitcoin hodler del planeta.
"El gobierno de EE. UU. debería poseer la mayoría de los Bitcoin en el mundo," declaró Saylor en la Conferencia Bitcoin 2024. Esto significaría más de 10.5 millones de BTC, valorados en $711 mil millones a los precios actuales.
Es una afirmación audaz. Actualmente, los federales tienen 208,898 BTC, en su mayoría incautados a criminales. Eso es poco comparado con el objetivo de Saylor.
Saylor no está solo en sus sueños cripto. Robert F. Kennedy Jr., candidato a la presidencia, quiere que el gobierno iguale sus reservas de oro con Bitcoin. EE. UU. tiene 8,134 toneladas métricas de oro, valoradas en $615 mil millones.
¿Por qué molestarse? Se trata de respaldar el dólar. Saylor lo compara con comprar Manhattan por centavos en su momento.
"El futuro del país está en el ciberespacio, y Bitcoin es, en esencia, el 'ciber-Manhattan'," dijo. Él cree que podría valer billones en el futuro.
La política está cada vez más interesada en las criptomonedas. Donald Trump habla de proteger a los mineros de Bitcoin. El equipo de Kamala Harris está investigando, charlando con grandes figuras del cripto como Mark Cuban.
Pero no todo es un camino de rosas. La administración de Biden ha estado tomando medidas enérgicas contra las empresas de criptomonedas. Cualquier plan para respaldar el dólar con Bitcoin necesitaría un cambio de política significativo.
Bryan Courchesne de DAIM.io cree que es posible, pero complicado. "El Departamento de Justicia tiene alrededor de 200,000 Bitcoin," dijo a CNBC. "Podrían fácilmente transferir eso al Departamento del Tesoro."
Si EE. UU. apostara todo al plan de Kennedy, necesitaría comprar $154 mil millones en Bitcoin anualmente durante cuatro años. Eso es mucho oro digital.
Saylor no es tímido sobre sus predicciones de Bitcoin. Cree que la capitalización del mercado llegará a $280 billones para 2024. Eso es un crecimiento de 200x desde hoy. Habla de apuntar a la luna.
Por ahora, todo es una quimera. Pero con las criptomonedas entrando en la política mainstream, ¿quién sabe? Tal vez Tío Sam estará acumulando sats antes de lo que pensamos.