El presidente ruso, Vladimir Putin, ha levantado la alarma sobre una inminente crisis energética. ¿El culpable? El crecimiento descontrolado de la minería de bitcoin en el país. Sí, esto es lo que realmente preocupa al presidente del país en medio de una guerra convencional.
Putin destacó el enorme consumo de energía de las operaciones mineras. Representan aproximadamente el 1.5% del uso total de electricidad de Rusia. Son unos impresionantes 16 mil millones de kilovatios-hora anualmente, lo cual sería suficiente para que varios países pequeños sobrevivan por años.
Las preocupaciones del presidente se centran en regiones como Irkutsk, Buriatia y el Krai de Zabaikalie. Estas áreas han estado experimentando frecuentes cortes de energía. Tal vez, las instalaciones militares se quedan sin electricidad con demasiada frecuencia, pero quién sabe, no nos dirán la verdad de todos modos.
Putin reconoció que las criptomonedas no son dinero convencional. Sin embargo, señaló su creciente uso en liquidaciones internacionales. Destacó las significativas demandas energéticas de la minería de monedas digitales.
Rusia se ha convertido en un punto caliente para estas operaciones. Los precios bajos de la energía y los equipos de minería portátiles son los principales atractivos. Putin advirtió que la expansión descontrolada podría llevar los sistemas de energía regionales al punto de ruptura.
El drenaje de energía tiene implicaciones más amplias más allá de los costos operacionales. Putin destacó riesgos sociales y económicos más amplios. Señaló que los cortes de energía podrían afectar a negocios, viviendas y servicios públicos.
Las declaraciones del presidente reflejan las preocupaciones expresadas por los líderes regionales. Han destacado posibles interrupciones en nuevos negocios, áreas residenciales e infraestructura social crucial.
"El aumento incontrolado del consumo de electricidad para la minería de criptomonedas puede llevar a un déficit de energía en algunas regiones," dijo Putin. No es ciencia de cohetes, amigos.
En medio del caos de la minería de criptomonedas, Putin también aprovechó la oportunidad para promover el rublo digital de Rusia. Esta moneda digital del banco central (CBDC) ya está causando revuelo. El líder ruso probablemente esté impresionado por lo que China hace intentando controlar a sus ciudadanos con el proyecto del yuan digital, que aún está por cumplirse.
El rublo digital ha facilitado 7,000 pagos por bienes y servicios. También ha permitido más de 27,000 transferencias. Putin está impulsando fuertemente su adopción, promocionando estos números como prueba de su "eficiencia y utilidad."
El rublo digital es un actor clave en la estrategia más amplia de Rusia. Es parte de un plan para modernizar el sistema financiero y reducir la dependencia de las instituciones financieras occidentales. Con las sanciones occidentales mordiéndoles, está alto en la agenda económica de Rusia.
El gobierno de Putin está instando a las empresas a explorar criptomonedas y otros activos digitales. Los ven como alternativas a los sistemas de transacciones internacionales. Es un movimiento audaz, por decir lo menos.
La situación es un poco un lío, en realidad. Rusia está equilibrando oportunidades económicas con riesgos potenciales. Nadie sabe cómo resultará esto a largo plazo.