Una nueva afirmación hecha por el investigador de criptomonedas Darkhorse ha reavivado discusiones sobre si Ripple Labs está eludiendo silenciosamente un mandato judicial federal que le impide vender directamente XRP a instituciones.
Las afirmaciones han provocado un acalorado debate dentro de la comunidad de criptomonedas, ya que algunos analistas argumentan que Ripple ha encontrado una manera de continuar vendiendo sus tokens sin violar el mandato, mientras que otros afirman que las acciones de Ripple son simplemente parte de la evolución continua del mercado.
El 4 de junio, Darkhorse utilizó X para sugerir públicamente que Ripple ha encontrado una forma legal y "limpia" de eludir el mandato. Según él, la nueva configuración de Ripple, que involucra una tesorería de XRP de $300 millones gestionada por Webus International Ltd., una empresa de movilidad con sede en Asia, permite a la empresa continuar distribuyendo XRP indirectamente.
En su publicación, Darkhorse argumenta que esta "nueva configuración de tesorería" permite a Ripple operar dentro de la ley utilizando un intermediario, en lugar de vender directamente a compradores institucionales.
La configuración detrás de la acusación
El núcleo del argumento de Darkhorse se basa en el uso de un intermediario regulado por Ripple; en este caso, un asesor de inversiones registrado en la SEC llamado Samara Alpha. Según la presentación del Formulario 6-K de Webus, este nuevo modelo de tesorería delega la gestión de hasta $300 millones en XRP a Samara Alpha, quien luego asigna los activos tokenizados a Webus, un cliente corporativo.
Darkhorse sostiene que esta estructura permite a Ripple vender XRP sin violar el mandato, que específicamente prohíbe a Ripple vender directamente a inversores institucionales sin la aprobación de la SEC.
Darkhorse explica que el modelo de tesorería de XRP implica una ruta más indirecta, permitiendo a Ripple mantener el cumplimiento al enrutar XRP a través de intermediarios financieros regulados, como Samara Alpha, que están sujetos al escrutinio de reguladores de EE. UU. Esta configuración, argumenta, es una estructura "de cumplimiento por diseño", eludiendo las restricciones legales de Ripple y permitiendo que la empresa descargue sus participaciones en XRP.
"Ripple tiene prohibido ventas directas a instituciones sin la autorización de la SEC," afirmó Darkhorse. "¿El rodeo? Vender a intermediarios regulados (como Samara en nombre de Webus) con acuerdos de tesorería que son transparentes para la SEC y no dirigidos al mercado minorista. Está estructurado, no es casual."
La respuesta de Ripple
Jay Nisbett, un comentarista de XRP de larga data, rechazó la afirmación de Darkhorse, insistiendo en que esta configuración no es un "rodeo" astuto sino un paso natural hacia la adopción institucional. Nisbett argumentó que Webus no tiene ninguna asociación oficial con Ripple y que simplemente está adquiriendo XRP de la misma manera que cualquier participante del mercado, a través de compras en el mercado secundario.
En su opinión, las participaciones de XRP de Webus no son más que "custodia pasiva", no una maniobra para evadir restricciones legales.
Nisbett también sostuvo que la decisión de canalizar el token a través de un intermediario registrado en la SEC simplemente forma parte de la evolución natural del mercado en respuesta a obstáculos regulatorios, no un intento deliberado de evadir marcos legales.
La contrademanda: la tesorería de XRP de Webus es más que solo custodia
Darkhorse respondió enfáticamente a las afirmaciones de Nisbett, reiterando que la creación de la tesorería de XRP de $300 millones no fue una compra casual de tokens, sino un instrumento financiero estructurado diseñado para navegar por los límites legales. Destacó que Webus no solo presentó una intención de comprar XRP en el mercado abierto. En cambio, la presentación del Formulario 6-K detalló específicamente la creación de una tesorería de XRP gestionada por una entidad regulada.
Darkhorse señaló que este método está diseñado para distanciar a Ripple de cualquier venta directa de XRP a instituciones, protegiendo a la empresa de un escrutinio regulatorio adicional.
Destacó que la estructura de la tesorería de XRP no es solo para mantener activos en un balance, sino para desplegarlos como parte de una estrategia de gestión de tesorería. El hecho de que Webus utilice a un gestor delegado y orientado a la SEC, como Samara Alpha, indica que Ripple está navegando por el riesgo institucional asociado con el estado legal de XRP.
Esto, argumenta Darkhorse, muestra que Ripple es muy consciente de las complejidades legales que rodean la venta de XRP y está tomando medidas para operar dentro de esas restricciones.
Los desafíos legales de Ripple: la lucha continua con la SEC
La saga legal de Ripple con la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. ha estado en curso durante años, y los desafíos legales de la empresa continúan dando forma a sus operaciones. El mandato judicial permanente emitido por la jueza Torres en 2024 prohíbe a Ripple vender XRP directamente a instituciones a menos que las ventas estén registradas en la SEC. Este mandato ha puesto a Ripple en una posición difícil, ya que los ingresos de la empresa dependen en gran medida de la venta de XRP.
A pesar de las afirmaciones de Ripple sobre el estado de XRP como no-valor, la SEC continúa desafiando a la empresa, afirmando que el token está sujeto a regulaciones de valores. El último desarrollo ha llevado a algunos a especular que Ripple está aprovechándose de lagunas legales, o alternativamente, algunos lo ven como una progresión natural del mercado hacia las finanzas criptográficas reguladas.
En ausencia de claridad de la SEC, Ripple ha estado explorando formas de trabajar dentro de los límites de la ley sin detener sus operaciones. Esto incluye la venta de XRP a través de intermediarios institucionales que tienen autorización regulatoria, como se ve con el nuevo modelo de tesorería.
¿Pasará esta estrategia el escrutinio regulatorio?
El éxito de la estrategia de Ripple depende en gran medida de cómo ven los reguladores estos nuevos mecanismos. Mientras que el equipo legal de Ripple puede sentirse seguro con esta nueva estructura, la SEC y otros reguladores pueden tener una opinión diferente. La agencia ha buscado históricamente regular las ventas de criptomonedas que involucran a inversores institucionales, y el rodeo de Ripple podría ser escrutado por cualquier posible violación de las leyes de valores existentes.
Complicando aún más las cosas, la batalla legal en curso sobre el estado de XRP podría dar lugar a órdenes judiciales adicionales que restrinjan o amplíen la capacidad de Ripple para vender XRP a compradores institucionales. El futuro de Ripple podría depender de si la SEC toma medidas contra el nuevo modelo de tesorería o lo acepta como una evasión legítima.
En medio de estas incertidumbres legales, XRP se ha mantenido relativamente resiliente en el mercado, con el token cotizando a $2.1989 en el momento de la publicación. A pesar de los desafíos legales, el token ha continuado viendo interés tanto de inversores minoristas como institucionales, en parte debido a su creciente adopción dentro de la comunidad de criptomonedas.
Sin embargo, cualquier movimiento legal potencial de la SEC en contra de la estrategia de tesorería de Ripple podría llevar a la volatilidad del mercado para XRP, ya que los inversores sopesan los riesgos involucrados en las batallas regulatorias en curso. El precio del token y la percepción general del mercado probablemente continuarán siendo influenciados por los desarrollos en la lucha de Ripple con la SEC.
El presunto rodeo de Ripple a través de una nueva tesorería de XRP gestionada por Samara Alpha y Webus es un intento audaz de navegar las complejidades del mandato de la SEC. Mientras que algunos lo ven como una estrategia legal y de cumplimiento para continuar distribuyendo XRP, otros argumentan que esta configuración podría ser una puerta trasera para eludir las restricciones impuestas a la empresa.