Los inversionistas institucionales están empezando a redirigir capital de Bitcoin y Ethereum hacia una clase de ETF de altcoins recientemente aprobados, un cambio que los analistas señalan como el inicio del próximo ciclo institucional de las criptomonedas, según una nueva investigación del BitMart Research Institute.
Los datos muestran que los ETF de altcoins están absorbiendo entradas incluso mientras los vehículos de BTC y ETH enfrentan salidas persistentes, lo que indica que los inversionistas tradicionales están tratando a activos como Solana (SOL), Ripple (XRP), HBAR y Chainlink no como añadidos especulativos sino como componentes legítimos de carteras a largo plazo.
Los analistas describen este movimiento como la señal más clara hasta ahora de que la participación institucional en cripto se está ampliando más allá de los dos activos dominantes por primera vez.
Este cambio estructural sigue a dos grandes catalizadores regulatorios en EE. UU.: • Los nuevos Estándares Generales de Cotización de la SEC, que crearon un marco unificado que permite listar ETF de altcoins en tan solo 60–75 días. • La activación temporal de la Sección 8(a) durante el cierre de gobierno, que permitió a los emisores eliminar cláusulas de demora y hacer que las presentaciones entren en vigencia automáticamente después de 20 días.
En conjunto, estos cambios abrieron una ventana de aprobación poco común, que grandes emisores como BlackRock, Fidelity, VanEck, Franklin Templeton y Bitwise aprovecharon rápidamente.
Su participación llevó por primera vez fondos de pensiones, aseguradoras, gestores de patrimonio y canales 401(k) hacia las altcoins de forma conforme a la normativa.
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El ecosistema de ETF de Solana ya ha acumulado 915 millones de dólares en activos, a pesar de que SOL ha caído un 31 % desde su cotización.
Los ETF de XRP han captado 824 millones de dólares, mientras que el HBAR de menor capitalización ha atraído 82 millones, lo que representa una penetración fuerte en relación con su capitalización de mercado.
Incluso los productos recién lanzados de LINK registraron casi 41 millones de dólares en flujos en su primer día.
En contraste, los ETF de DOGE y LTC han mostrado una demanda débil, lo que resalta una marcada divergencia entre los activos con narrativas institucionales y aquellos que dependen del impulso minorista.
El informe además afirma que está en marcha una segunda fase de expansión, en la que se espera que AVAX, ADA, DOT, BNB, TRX, APT y SEI formen la próxima cohorte de aprobaciones.
Los analistas advierten que la inclusión en ETF determinará cada vez más la liquidez, la visibilidad y la supervivencia a largo plazo, creando una división estructural entre los activos regulados y aquellos que quedan fuera del perímetro de cumplimiento.
“Los ETF de altcoins ya no son experimentos”, señalan los autores. “Se están convirtiendo en el mecanismo a través del cual las finanzas tradicionales entran en el ecosistema multibloque y están remodelando los flujos de capital en tiempo real.”
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