Cuando el presidente de EE. UU., Donald Trump, firmó la orden ejecutiva para establecer el grupo de trabajo de activos digitales la semana pasada, comenzó el proceso de formar una reserva de Bitcoin para el país. Las reservas estratégicas de EE. UU. son un marcador importante de las materias primas, y la reserva de bitcoin indicaría la necesidad de inversiones en criptomonedas en este mundo. El efecto de esto ya se siente en todo el mundo, ya que muchos países también están considerando similares tenencias de Bitcoin para su seguridad económica.
Así que, vamos a desentrañar el concepto de la Reserva Estratégica de EE. UU. y cómo se aplicará a Bitcoin. Además, divulgaremos los riesgos y desafíos de este movimiento y cómo afectará al mercado
¿Qué es una Reserva Estratégica de EE. UU.?
El concepto de reservas estratégicas no es nuevo en los Estados Unidos. Durante casi cinco décadas, la Reserva Estratégica de Petróleo de EE. UU. ha servido como un amortiguador crucial contra los shocks económicos y las interrupciones de suministro en el mercado del petróleo. Creada en respuesta al embargo petrolero árabe de 1973-74, esta enorme reserva de petróleo crudo ha demostrado su valía repetidamente en tiempos de crisis. Ahora, la nación parece lista para aplicar este concepto probado en el tiempo a la era digital a través de la Reserva Estratégica de Bitcoin de EE. UU.
Otros países como Canadá y China también tienen reservas estratégicas de otras materias primas. Mientras que China ha creado reservas para productos de cerdo, granos y metales, Canadá tiene una para el jarabe de arce. Cada uno de estos ejemplos muestra lo que es importante para el país.
¿Cómo funcionará una Reserva Estratégica de Bitcoin?
La iniciativa actual comienza con un grupo de trabajo de activos digitales, encargado de desarrollar criterios para un posible acopio de criptomonedas para julio. Lo que hace esto particularmente interesante es el enfoque inicial en aprovechar los activos digitales existentes en manos del gobierno, aproximadamente 200,000 fichas de bitcoin valoradas en aproximadamente $21 mil millones, actualmente bajo el control del Departamento de Justicia de diversas operaciones policiales.
La senadora Cynthia Lummis, ella misma un tenedor de bitcoins, ha propuesto quizás el marco más comprensivo para el componente criptográfico de la Reserva Estratégica de EE. UU. Su ambicioso proyecto de ley contempla un programa operado por el Tesoro que adquiriría sistemáticamente 200,000 bitcoins anualmente durante cinco años, acumulando hasta un enorme acopio de un millón de fichas, representando aproximadamente el 5% del suministro global total de bitcoin.
La reserva de Bitcoin propuesta mantendrá las criptomonedas confiscadas a criminales bajo el Departamento de Justicia.
¿Cómo ayudará una Reserva de Bitcoin?
Los beneficios potenciales de una Reserva Estratégica de Bitcoin de EE. UU. se extienden mucho más allá de la mera tenencia de activos. La administración del presidente Trump ha posicionado esta iniciativa como un movimiento estratégico para asegurar la dominación estadounidense en el mercado global de bitcoin, particularmente a la luz de la creciente competencia de China. Esta perspectiva se alinea con consideraciones más amplias de seguridad nacional, ya que la criptomoneda intersecta cada vez más con las dinámicas de poder geopolíticas.
Las implicaciones financieras podrían ser igualmente significativas. Los defensores, incluyendo a la senadora Lummis, argumentan que tal reserva podría servir como una poderosa herramienta para la reducción del déficit sin aumentar la carga fiscal. El plan utilizaría las ganancias de los depósitos de los bancos de la Reserva Federal y las tenencias de oro para financiar las adquisiciones de bitcoin, potencialmente reduciendo la deuda nacional a la mitad en dos décadas, mientras fortalece la posición global del dólar estadounidense.
Según Cynthia Lummis, "Lo que hace esto es ayudarnos a protegernos contra la inflación y proteger al dólar estadounidense en el escenario mundial." Mientras tanto, el analista de criptos Macroscope cree que expandiría el grupo de participantes, ciertamente en términos de capital disponible.
"Esto tendría importantes implicaciones globales. Sería debido a la mentalidad de carrera armamentista que se desarrollaría. Los ETFs impactaron el precio de Bitcoin a través de un acceso más fácil. Una reserva estratégica de EE. UU. impactará el precio a través de la psicología global y la urgencia", dijo el analista.
¿Qué desafíos necesitan ser abordados?
Sin embargo, el camino para establecer una Reserva Estratégica de Bitcoin de EE. UU. no está exento de escépticos y desafíos. Los críticos señalan la historia relativamente corta de bitcoin, existiendo solo desde 2008, y su notoria volatilidad de precios como factores de riesgo significativos. A diferencia de las reservas estratégicas tradicionales de materias primas como el petróleo o los metales, bitcoin carece de utilidad industrial intrínseca, haciendo su proposición de valor a largo plazo más incierta.
Las preocupaciones de seguridad también son grandes, con las billeteras de criptomonedas permaneciendo vulnerables a ataques cibernéticos sofisticados. Además, la participación del mercado por parte del gobierno presenta un desafío único: cualquier actividad significativa de compra o venta podría impactar sustancialmente el precio de mercado de bitcoin, potencialmente creando consecuencias no deseadas tanto para la reserva como para el mercado cripto en general.
¿Un nuevo capítulo en la seguridad económica de EE. UU.?
A medida que el grupo de trabajo de activos digitales desarrolla sus recomendaciones, el concepto de una Reserva Estratégica de Bitcoin de EE. UU. representa más que solo un acopio gubernamental; simboliza la evolución de cómo las naciones abordan la seguridad económica en un mundo cada vez más digital. Si esta iniciativa logrará sus ambiciosos objetivos está aún por verse, pero su mera existencia marca un hito significativo en la aceptación generalizada de la criptomoneda como un activo nacional estratégico.