Funcionarios de la Unión Europea emitieron llamados urgentes para acelerar el desarrollo de stablecoins respaldadas por euros durante el Foro Fintech del 9 de octubre en París, advirtiendo que la continua dependencia de las monedas digitales denominadas en dólares estadounidenses amenaza la soberanía financiera de la región. Pierre Gramegna, director gerente del Mecanismo Europeo de Estabilidad, dijo que Europa no puede permitirse depender de stablecoins en dólares que actualmente dominan los mercados. Las declaraciones se producen mientras las stablecoins en euros representan solo $620 millones del mercado global de stablecoins de $300 mil millones.
Qué saber:
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Los funcionarios europeos advierten que las stablecoins en euros representan solo $620 millones en un mercado de $300 mil millones actualmente dominado por alternativas denominadas en dólares estadounidenses.
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Nueve grandes bancos europeos planean lanzar una stablecoin respaldada por euros en la segunda mitad de 2026 bajo el marco de regulación de Mercados en Criptoactivos de la UE.
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EE. UU. aprobó recientemente el Acta GENIUS, que requiere el respaldo uno a uno de las stablecoins con efectivo o activos líquidos, intensificando la competencia en la regulación de la moneda digital.
Funcionarios europeos impulsan la independencia monetaria
Gramegna se dirigió a la conferencia de tecnología financiera con un lenguaje directo sobre la posición de Europa en los pagos digitales. "Europa no debería depender de stablecoins denominadas en dólares estadounidenses, que actualmente dominan los mercados", dijo. "Las stablecoins son una parte inevitable de esta ecuación."
Enfatizó la necesidad de emisores nacionales para generar stablecoins denominadas en euros en lo que describió como un panorama financiero en rápida evolución.
François Villeroy de Galhau, gobernador del Banque de France, reforzó este mensaje con orientación específica para los bancos europeos.
"Si los bancos están mirando el mercado de stablecoins en dólares, ¿por qué no? Ahí es donde está el mercado hoy", dijo de Galhau. "Pero también deberían enfocarse en su mercado natural de mañana: las stablecoins en euros."
El banquero central francés fue más allá, describiendo la coexistencia de depósitos tokenizados y stablecoins en euros emitidos por bancos regulados como esencial para la futura arquitectura monetaria de Europa. Enmarcó la elección de manera tajante: "Podríamos tener ambos, pero no debemos terminar con ninguno."
Paschal Donohoe, presidente del Eurogrupo, ofreció apoyo medido para las iniciativas de moneda digital. Señaló que el euro digital aún podría ser positivo neto para el comercio en la región.
El Banco Central Europeo pidió una coordinación internacional más fuerte sobre la regulación de stablecoins en julio de 2025.
Nueve bancos se unen mientras avanza la legislación de EE. UU.
La urgencia expresada por los funcionarios europeos refleja la presión competitiva de los recientes movimientos regulatorios de EE. UU. El Acta GENIUS establece requisitos de que cada stablecoin debe estar respaldada uno a uno con efectivo o activos líquidos. Los emisores deben hacer públicas esas reservas bajo la legislación, que se aprobó como parte de un paquete más amplio que incluye la Acta CLARITY y la Acta Anti-CBDC de Vigilancia Estatal.
La Acta CLARITY otorga a la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas un control ampliado sobre los mercados de criptomonedas. La ley Anti-CBDC tiene como objetivo bloquear los esfuerzos de dólar digital por parte de la Reserva Federal.
Nueve de los bancos más grandes de Europa respondieron a estos desarrollos anunciando la colaboración en una stablecoin respaldada por euros.
ING, UniCredit, Danske Bank, SEB, KBC, DekaBank, Banca Sella y Raiffeisen Bank International planean lanzar la stablecoin bajo el marco del Reglamento de Mercados en Criptoactivos de la UE en la segunda mitad de 2026.
ING lanzó un comunicado conjunto el 25 de septiembre confirmando la iniciativa. "La iniciativa proporcionará una alternativa europea real al mercado de stablecoins dominado por EE. UU., contribuyendo a la autonomía estratégica de Europa en pagos", decía el comunicado.
Los bancos colaboradores dicen que la stablecoin ofrecerá pagos y liquidaciones inmediatos y de bajo costo. Prometen acceso 24/7 a pagos transfronterizos eficientes, pagos programables y mejoras en la gestión de la cadena de suministro y liquidaciones de activos digitales que abarcan desde valores hasta criptomonedas.
Entendiendo los términos de la moneda digital
Las stablecoins son criptomonedas diseñadas para mantener un valor estable al vincularse a monedas tradicionales como el dólar o el euro. A diferencia de Bitcoin o Ether, que pueden fluctuar drásticamente en precio, las stablecoins aspiran a combinar los beneficios de la tecnología de criptomonedas con la estabilidad del dinero respaldado por gobiernos. Las mayores stablecoins actualmente en circulación están denominadas en dólares estadounidenses.
El Reglamento de Mercados en Criptoactivos, conocido como MiCA, representa el marco integral de la UE para regular los activos digitales. La legislación establece estándares para emisores, plataformas de negociación y proveedores de custodia.
Apunta a proteger a los consumidores mientras fomenta la innovación en el sector de criptomonedas.
Los depósitos tokenizados difieren de las stablecoins en su estructura legal. Mientras que las stablecoins funcionan como nuevas formas de dinero digital, los depósitos tokenizados representan depósitos bancarios tradicionales registrados en tecnología blockchain. Los bancos que emiten depósitos tokenizados mantienen las mismas obligaciones regulatorias que tienen para los depósitos convencionales.
Reflexiones finales
Los funcionarios europeos y los grandes bancos están coordinando esfuerzos para establecer el euro como una fuerza significativa en el paisaje de la moneda digital antes de que las alternativas respaldadas por EE. UU. se arraiguen más. El cronograma de lanzamiento en 2026 para la iniciativa de stablecoins de nueve bancos representa el paso más concreto hacia ese objetivo, aunque el éxito depende de la claridad regulatoria y la adopción del mercado.