Las Calificaciones de Moody's han lanzado su sombrero al ruedo. La agencia de calificación crediticia de Wall Street acaba de publicar su primer informe sobre DePIN - infraestructura física descentralizada.
¿El veredicto? Es una bolsa mixta.
DePIN podría ser un cambio radical para las redes existentes. Podría ayudar a escalarlas e innovar. Pero no todo es color de rosa, ya que los obstáculos regulatorios podrían poner freno a las cosas.
"DePIN tiene el potencial de mejorar la fiabilidad y eficiencia de la red", dice Moody's. También podría reducir costos y aumentar la colaboración. Suena bastante bien, ¿verdad?
Pero no te adelantes. Hay "obstáculos significativos" para la adopción generalizada. Moody's señala problemas regulatorios, problemas de interoperabilidad y riesgos de ciberseguridad. Y no olvidemos la necesidad de inversiones considerables.
Los operadores de redes están sintiendo la presión, ya que la demanda de los usuarios está por las nubes, y necesitan nueva infraestructura, lo cual no es barato. DePIN podría ser su caballero de brillante armadura.
Aquí es donde se pone interesante. Los proyectos DePIN a menudo emiten sus propios tokens. Es una forma de incentivar la participación y el crecimiento. Pero hay un problema. Las regulaciones globales son, en el mejor de los casos, turbias, y el cumplimiento es una pesadilla esperando a suceder.
Hablemos de números. El capital de riesgo está lloviendo. $583 millones han ido a proyectos de DePIN solo este año. Eso ya es más que el récord anterior establecido en 2022.
Helium (HNT) es el niño modelo para DePIN. Es una red inalámbrica basada en blockchain. Los usuarios obtienen tokens por configurar puntos de acceso a internet. Hasta ahora, ha atraído a más de 350,000 participantes y 100,000 suscriptores.
Rajeev Bamra de Moody's intervino. Dice que el informe tiene como objetivo resaltar la necesidad de que las industrias replanteen la gestión de infraestructura.
Entonces, ¿cuál es la conclusión? DePIN muestra promesa, pero no está exento de desafíos.