Cartera

Co-fundadores de Samourai Wallet se declaran culpables en caso de lavado de Bitcoin de $100 millones

hace 3 horas
Co-fundadores de Samourai Wallet se declaran culpables en caso de lavado de Bitcoin de $100 millones

Dos ejecutivos detrás de Samourai Wallet revirtieron sus declaraciones de no culpabilidad el miércoles, admitiendo cargos federales en un caso que involucra más de $100 millones en ganancias criminales lavadas. Keonne Rodriguez y William Lonergan Hill, cofundadores de Samourai Wallet, se declararon culpables ante el juez Denise Cote en la corte federal de Manhattan después de negar inicialmente los cargos en abril de 2024.


Qué saber:

  • Samourai Wallet procesó más de $2 mil millones en transacciones ilegales, con $100 millones vinculados a actividades criminales que incluyen pagos del mercado de Silk Road.
  • Los co-fundadores enfrentan hasta 25 años de prisión por cargos de conspiración para lavado de dinero y operar un negocio de transmisión de dinero no autorizado.
  • Los críticos argumentan que el caso establece un precedente peligroso al criminalizar a los desarrolladores de herramientas de privacidad de criptomonedas de código abierto.

Fracaso de la estrategia legal

Los acusados montaron una agresiva campaña de defensa durante el año pasado, presentando múltiples mociones para descartar por completo los cargos. Su equipo legal se aprovechó de un memorando de abril del Subprocurador General Todd Blanche, que indicaba que el Departamento de Justicia reduciría las acusaciones basadas únicamente en acciones de usuarios o tecnicismos regulatorios.

Los abogados defensores argumentaron que sus clientes no deberían enfrentar responsabilidad penal por cómo los usuarios emplearon su software. Presentaron otra moción de despido en mayo, alegando que los fiscales habían ocultado comunicaciones internas de la Red de Control de Delitos Financieros que supuestamente mostraban que Samourai no calificaba como un transmisor de dinero según la ley federal.

El DOJ rechazó estos argumentos. Los fiscales mantuvieron que no tenían obligación de compartir las comunicaciones de FinCEN y avanzaron con su caso.

Caso del gobierno contra herramientas de privacidad

Los fiscales federales construyeron su caso alrededor de las funciones Whirlpool y Ricochet de Samourai, que alegaron fueron específicamente diseñadas para ocultar los orígenes de transacciones de Bitcoin. Documentos judiciales revelaron comunicaciones internas y publicaciones en redes sociales donde supuestamente Rodriguez y Hill reconocían el uso de su plataforma para actividades criminales y la promovían activamente con esos fines.

La acusación del gobierno detallaba cómo Samourai procesaba transacciones conectadas a mercados online ilegales, especialmente la plataforma extinta Silk Road. Los fiscales argumentaron que el servicio de mezcla facilitó el lavado de dinero a gran escala, manejando más de $2 mil millones en transacciones sospechosas durante su operación.

Implicaciones más amplias para el desarrollo de criptomonedas

El caso de Samourai representa parte de una represión federal más amplia sobre herramientas de privacidad de criptomonedas. Roman Storm, cofundador del mezclador Tornado Cash, actualmente enfrenta juicio en la misma corte de Manhattan con cargos similares de lavado de dinero, violaciones a sanciones y operar sin licencia adecuada.

El caso de Storm comenzó en julio, con fiscales alegando que su plataforma permitió a criminales lavar cientos de millones en activos digitales. El juicio ha atraído considerable atención de la comunidad de desarrollo de criptomonedas, que ve estas acusaciones como un exceso del gobierno.

Expertos legales y defensores de la privacidad han expresado preocupaciones sobre el precedente que estos casos podrían establecer. Argumentan que criminalizar a los desarrolladores de herramientas no custodiales—software que en realidad no retiene los fondos del usuario—podría sofocar la innovación en el espacio de criptomonedas.

Comprendiendo la tecnología de mezcla de criptomonedas

Los mezcladores de criptomonedas operan agrupando activos digitales de múltiples usuarios y redistribuyéndolos a diferentes direcciones, haciendo difícil rastrear el origen original de los fondos. Whirlpool, la función de mezcla de Samourai, automatizó este proceso combinando Bitcoin de usuarios con otros en agrupaciones de denominación igual.

Ricochet, otra herramienta de Samourai, agregó saltos de transacción adicionales para oscurecer aún más la conexión entre las direcciones del remitente y destinatario.

Mientras que los desarrolladores argumentan que estas herramientas cumplen con propósitos legítimos de privacidad, los fiscales sostienen que principalmente benefician a criminales que buscan ocultar ganancias ilícitas.

Las billeteras no custodiales se diferencian de los servicios financieros tradicionales porque no retienen directamente los fondos del usuario. En cambio, proporcionan software que permite a las personas controlar sus propias tenencias de criptomonedas, similar a cómo los navegadores web permiten acceso a Internet sin almacenar datos del usuario.

Respuesta de la industria

Un desarrollador de blockchain demandó al DOJ a principios de este año, desafiando lo que caracterizó como un exceso regulatorio en el enjuiciamiento a creadores de software de criptomonedas no custodiales. La demanda, presentada durante las semanas finales de la administración Biden, acusó a las autoridades federales de sofocar la innovación tecnológica a través de acciones de aplicación agresivas.

La industria de criptomonedas ha argumentado que tratar a los desarrolladores de software como transmisores de dinero bajo las leyes bancarias existentes representa un malentendido fundamental de cómo operan las tecnologías descentralizadas. Los grupos de la industria sostienen que los desarrolladores que crean herramientas de código abierto no deberían ser responsables de cómo el código autónomo funciona después de su implementación.

Pensamientos finales

Las declaraciones de culpabilidad de Rodriguez y Hill suponen una victoria significativa para los fiscales federales que persiguen crímenes relacionados con criptomonedas, aunque las preguntas legales más amplias sobre el desarrollo de herramientas de privacidad siguen sin resolverse. Con el juicio de Tornado Cash de Storm en curso y es probable que surjan casos adicionales, la industria de criptomonedas continúa lidiando con los límites entre la privacidad financiera y el cumplimiento normativo.

Descargo de responsabilidad: La información proporcionada en este artículo es solo para fines educativos y no debe considerarse asesoramiento financiero o legal. Siempre realice su propia investigación o consulte a un profesional al tratar con activos de criptomonedas.