Bitcoin (BTC) sigue rindiendo persistentemente por debajo de los activos tradicionales, lo que plantea dudas sobre si este ciclo es fundamentalmente distinto a anteriores mercados alcistas.
El analista cripto Benjamin Cowen sostiene que la configuración actual del mercado se parece estrechamente a la de 2019, cuando Bitcoin hizo un máximo en medio de apatía antes de que apareciera liquidez real.
El oro superó recientemente los 4.400 dólares por onza, mientras que Bitcoin cotiza en torno a los 87.000 dólares, aproximadamente un 30% por debajo de sus máximos históricos.
Los principales índices bursátiles también han superado a Bitcoin: el S&P 500 y el Nasdaq han registrado ganancias de dos dígitos mientras BTC se mantiene prácticamente plano en lo que va de año.
Qué ocurrió
Cowen dijo a Cointelegraph que Bitcoin responde a las condiciones de liquidez reales más que al mero optimismo del mercado.
Mientras las acciones y el oro suben por las expectativas de futuras medidas de relajación monetaria, Bitcoin necesita catalizadores macroeconómicos más claros antes de superar a otros activos.
El analista destacó un sentimiento inusualmente bajo a pesar de unos precios relativamente altos.
Los máximos de ciclos anteriores se caracterizaron por un entusiasmo y una especulación minorista generalizados.
En cambio, este mercado se ha definido por una apatía relativa.
Cowen abordó el debate sobre el ciclo de cuatro años y presentó datos que muestran que los ciclos de mercado más amplios siguen desempeñando un papel importante.
Explicó cómo los vientos en contra macro, incluidos las tendencias del mercado laboral y las condiciones financieras restrictivas, pueden pesar sobre Bitcoin hasta 2026.
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Por qué es importante
La comparación con 2019 sugiere que Bitcoin podría necesitar un prolongado periodo de consolidación antes de su próxima subida sostenida.
En 2019, Bitcoin alcanzó un máximo cercano a los 13.000 dólares en junio antes de entrar en una corrección prolongada que duró hasta que comenzó el ciclo de expansión cuantitativa de 2020.
Las condiciones actuales reflejan ese patrón, con un endurecimiento cuantitativo aún en vigor.
La entrevista subrayó el proceso por encima de las predicciones de precios, centrándose en cómo los inversores deberían pensar sobre los ciclos y la gestión del riesgo.
Cowen también habló de las altcoins, sugiriendo que las expectativas de rotaciones rápidas podrían estar fuera de lugar sin una expansión más amplia de la liquidez.
El análisis contrasta con las narrativas más alcistas que surgieron tras los lanzamientos de ETF de Bitcoin y los repuntes posteriores a las elecciones.
Los rebotes a corto plazo siguen siendo posibles, pero un impulso sostenido puede requerir cambios reales de política más que los simplemente anticipados.
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