La Unión Europea está explorando el uso de redes de blockchain públicas como Ethereum y Solana para apoyar su próximo euro digital, marcando una notable desviación de los modelos de CBDC tradicionalmente favorecidos, que son privados o con permisos. Si se confirma, esto posicionaría a la UE como una de las primeras jurisdicciones mundiales en considerar seriamente la arquitectura de blockchain abierta para una moneda digital soberana.
Según un informe de Financial Times publicado el viernes, el Banco Central Europeo (BCE) está evaluando activamente si construir el euro digital sobre una infraestructura de blockchain pública, en lugar de una privada. La información fue atribuida a fuentes con conocimiento directo del asunto.
Si se implementa, este cambio representaría un cambio radical en el diseño de la moneda digital emitida por bancos centrales (CBDC), alineando a la UE más estrechamente con iniciativas de stablecoins impulsadas por el mercado en los Estados Unidos y distanciándola de modelos controlados por el estado como el yuan digital de China, que opera sobre un sistema cerrado y con permisos.
Una CBDC de Blockchain Pública: La Opción Ethereum y Solana
En el núcleo de este posible movimiento está la reevaluación del BCE de blockchains públicas versus privadas para alojar el euro digital.
Las blockchains públicas como Ethereum y Solana son descentralizadas, transparentes y globalmente accesibles, lo que las convierte en ampliamente utilizadas en la industria criptográfica para stablecoins, aplicaciones DeFi y emisión de activos digitales. Estas características contrastan fuertemente con las blockchains privadas, donde la visibilidad de los datos, los mecanismos de consenso y el acceso están restringidos a instituciones seleccionadas.
Una fuente familiarizada con las discusiones internas del BCE dijo al FT que el uso de blockchain pública es “definitivamente algo que están tomando más en serio ahora”. Otra enfatizó que si el BCE optara por un diseño cerrado, el euro digital se parecería más al e-CNY centralizado de China, una dirección que algunos responsables europeos ahora están ansiosos por evitar.
Cambio Estratégico: Alejándose del Modelo Chino
El yuan digital del Banco Popular de China opera a través de un libro mayor centralizado, donde el estado retiene el control sobre la emisión, distribución y acceso a los datos. Este modelo de "moneda de vigilancia" ha generado preocupaciones sobre privacidad, transparencia y competencia en los mercados financieros globales.
En cambio, si el euro digital se implementara vía Ethereum o Solana, se asemejaría a sistemas de stablecoins regulados como los utilizados por Circle (emisor de USDC) o Paxos (emisor de PayPal USD). Estos operan sobre blockchains transparentes con reservas verificables en la cadena y automatización de contratos inteligentes, todo lo cual teóricamente podría mejorar la supervisión del BCE mientras se aumenta la confianza del usuario.
Este cambio se produce en medio de una creciente preocupación europea por las stablecoins dominadas por el dólar estadounidense, particularmente a medida que las tensiones geopolíticas y la adopción de finanzas digitales aceleran.
Respuesta de Política de la UE a la Dominancia de Stablecoins de EE. UU.
El miembro del consejo ejecutivo del BCE, Piero Cipollone, ha criticado públicamente el creciente uso de las stablecoins respaldadas por el dólar en Europa. En abril de 2025, advirtió que el 98% del mercado de stablecoins actualmente está vinculado al dólar estadounidense, lo que representa riesgos a largo plazo para la soberanía monetaria europea y la autonomía financiera local.
Sus comentarios siguieron a declaraciones de otros reguladores europeos que abogaban por el rápido despliegue de un euro digital que pueda servir como una alternativa viable, denominaba en euros, a USDC y USDT.
“Sin una opción europea, corremos el riesgo de externalizar nuestro futuro monetario digital,” advirtió Cipollone en abril, citando el rápido crecimiento de las stablecoins privadas y el riesgo de que Europa se vuelva excesivamente dependiente de infraestructuras financieras extranjeras.
La exploración de Ethereum y Solana puede verse como una respuesta pragmática a la creciente popularidad de las blockchains públicas. Ambas plataformas ya se utilizan globalmente para stablecoins, NFTs, activos tokenizados y pagos - todas características que se alinean con la ambición del BCE de modernizar el euro para la era digital.
Ethereum vs Solana: Una Decisión Técnica con Implicaciones Políticas
Aunque no se ha tomado una decisión final, Ethereum y Solana representan dos paradigmas arquitectónicos muy diferentes:
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Ethereum es la blockchain pública más probada con un fuerte enfoque en la seguridad, descentralización y programabilidad. Soporta principales stablecoins con paridad en euros y dólares estadounidenses y se beneficia de una gran confianza institucional, especialmente después de su transición a prueba de participación.
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Solana, por otro lado, es conocida por tarifas de transacción extremadamente bajas y alto rendimiento, lo que la hace atractiva para pagos de consumo y liquidación a gran volumen. Sin embargo, ha enfrentado inestabilidad ocasional en la red y menos adopción regulatoria en comparación con Ethereum.
La exploración del BCE de ambas cadenas sugiere que todavía está evaluando los compromisos entre velocidad, descentralización y controles de cumplimiento.
Privacidad, Gobernanza y Supervisión Regulatoria Aún Son Preocupaciones Clave
Incluso si se implementa en una cadena pública, el euro digital no funcionaría como un activo típico sin permisos. Los observadores esperan que el BCE mantenga el control sobre la emisión, los parámetros de política monetaria y la aplicación del cumplimiento, posiblemente a través de contratos inteligentes personalizados, control de acceso basado en identidad, y billeteras de lista blanca.
La privacidad sigue siendo una preocupación significativa. Un libro público implica datos de transacciones transparentes, lo que podría generar temores de protección al consumidor y vigilancia a menos que se mitiguen mediante pruebas de cero conocimiento o capas de privacidad interoperables - tecnologías que están siendo cada vez más exploradas tanto por desarrolladores de Ethereum como por investigadores de la UE.
Se espera que la UE mantenga reglas estrictas de Conozca Su Cliente (KYC) y Anti-Lavado de Dinero (AML), que pueden requerir una integración con instituciones financieras existentes y sistemas de identificación digital.
Cronograma y el Piloto del Euro Digital
El BCE no ha confirmado públicamente si elegirá Ethereum, Solana u otra infraestructura. Sin embargo, la institución se ha comprometido a un prototipo y un piloto limitado del euro digital para finales de 2025, con discusiones de despliegue más amplias programadas para 2026 y más allá.
La fase actual de exploración es parte de un proceso de consulta más amplio lanzado por la Comisión Europea y el BCE en 2021, que involucra bancos centrales nacionales, legisladores de la UE y socios del sector privado.
Hasta ahora, los ensayos se han centrado en la funcionalidad de pago fuera de línea, la programabilidad y los casos de uso transfronterizos, con bancos participantes expresando su apoyo a modelos híbridos que combinan infraestructura pública con supervisión central.
Implicaciones para la Industria y el Mercado
Una decisión por parte de la UE de usar Ethereum o Solana marcaría un respaldo histórico de la infraestructura de blockchain pública por uno de los bloques monetarios más poderosos del mundo.
Podría sentar un precedente para otras jurisdicciones, particularmente en América Latina, el sudeste asiático y África, donde las cadenas públicas ya se usan para tesorerías tokenizadas, remesas y finanzas móviles.
Además, el movimiento podría acelerar la claridad regulatoria para las cadenas públicas en Europa, aumentando la liquidez del euro en la cadena, la participación institucional en DeFi y la emisión de stablecoins con permisos dentro del bloque.
Hasta hoy, ni el BCE ni la Comisión Europea han confirmado qué cadenas están oficialmente en consideración. Las solicitudes de comentarios de los medios, incluido Cointelegraph, no han sido respondidas.
Conclusión
La exploración informada de la Unión Europea de Ethereum y Solana para el euro digital es un desarrollo crucial en la evolución de las monedas digitales emitidas por bancos centrales.
Aunque no se han tomado decisiones finales, la consideración seria de la infraestructura de blockchain pública señala una posible ruptura con el autoritarismo digital al estilo chino y un movimiento hacia sistemas financieros abiertos, interoperables y favorables a la innovación.
Con stablecoins, activos tokenizados y finanzas descentralizadas remodelando los mercados monetarios globales, el próximo paso de la UE podría redefinir cómo las monedas digitales soberanas coexisten con el internet abierto de valor.