Tailandia está sentando las bases para que los turistas internacionales puedan gastar criptomonedas a través de plataformas vinculadas a tarjetas de crédito, marcando un cambio notable en su enfoque hacia los activos digitales y la modernización financiera. La propuesta, aún en revisión regulatoria, viene acompañada de esfuerzos legislativos más amplios dirigidos a alinear los mercados de capital del país con la economía digital.
El 26 de mayo, el Viceprimer Ministro y Ministro de Finanzas, Pichai Chunhavajira, dio a conocer la iniciativa en un seminario de inversión en Bangkok. El anuncio indica una estrategia dual: permitir la integración a corto plazo de criptomonedas en el sector turístico mientras se persigue una reforma regulatoria a largo plazo de los instrumentos financieros tanto digitales como tradicionales.
Bajo el modelo propuesto, los turistas que visiten Tailandia podrán gastar criptomonedas vinculando sus tenencias a tarjetas de crédito. El sistema procesará los pagos en baht tailandés del lado del comerciante, protegiendo a los vendedores locales de la volatilidad de las criptomonedas y la exposición regulatoria. Los comerciantes no necesitarán saber que la transacción se originó en moneda digital, creando una experiencia similar a la de fiat para ambas partes.
La implementación, liderada conjuntamente por el Ministerio de Finanzas y el Banco de Tailandia, depende de la finalización de controles de infraestructura y preparación regulatoria. Aunque no se ha confirmado una fecha de lanzamiento, el gobierno ha indicado su disposición para actuar rápidamente una vez que los marcos técnicos y legales estén finalizados.
“Este enfoque puede adaptarse inmediatamente a Tailandia, siempre que los sistemas de apoyo estén en su lugar”, dijo Pichai, quien también enfatizó que el modelo evita el uso directo del baht tailandés en la transacción por parte del consumidor; un movimiento destinado a minimizar el riesgo de cambio y preservar el control monetario interno.
La estrategia recuerda a otros modelos de pago con criptomonedas que pasan las transacciones por intermediarios para entregar fiat en el punto de venta. Dichos modelos se han implementado en países como los Emiratos Árabes Unidos, Japón y partes de Europa, a menudo utilizando billeteras respaldadas por stablecoin o herramientas de conversión centralizadas.
Reforma Regulatoria: Uniendo Capitales y Mercados Digitales
Más allá del uso de cripto centrado en el turismo, el gobierno tailandés está llevando a cabo una revisión más amplia de sus leyes financieras para lograr una mayor coherencia en su entorno regulatorio fragmentado. Actualmente, los mercados de capital tradicionales y las actividades de activos digitales se rigen por marcos separados, lo que ha creado ambigüedades legales y desafíos de cumplimiento para instituciones financieras y startups tecnológicas por igual.
Según Pichai, un objetivo principal es armonizar la regulación de valores y tokens digitales bajo un marco legislativo unificado. El gobierno también está considerando levantar restricciones obsoletas que impiden que grandes inversionistas institucionales - incluyendo aseguradoras de vida y fondos de pensiones - asignen capital más allá de bonos gubernamentales de bajo rendimiento. Estos portafolios institucionales, valorados en cientos de miles de millones de baht, podrían recibir permiso para invertir en acciones e instrumentos del sector privado bajo las reformas propuestas.
El Ministerio de Finanzas está evaluando además cambios en las normas que rodean la recompra de acciones en tesorería y está evaluando cómo regular mejor el comercio de alta frecuencia (HFT). Estas reformas se están posicionando como parte de una estrategia más amplia para hacer los mercados financieros de Tailandia más dinámicos y equitativos.
Fortalecimiento de la Aplicación y Supervisión del Mercado
Un proyecto de ley actualmente en curso ampliaría los poderes de aplicación de la Comisión de Bolsa y Valores de Tailandia (SEC), permitiéndole escalar las violaciones graves directamente a los fiscales públicos sin pasar primero por agencias intermedias. Esta medida está pensada para agilizar la acción reguladora y mejorar la protección del inversor, especialmente en el espacio de activos digitales de rápida evolución donde las áreas grises legales pueden retrasar la aplicación.
La manipulación del mercado, el front-running y los volúmenes de negociación excesivos de sistemas de comercio algorítmico también han estado bajo escrutinio en los últimos años. Aunque los mercados de acciones y criptomonedas de Tailandia han crecido, particularmente entre los inversores más jóvenes y comerciantes minoristas, los mecanismos de supervisión se han quedado atrás. Las reformas legales propuestas apuntan a cerrar estas brechas al otorgar a los reguladores las herramientas para actuar rápidamente y con decisión.
Iniciativas de Activos Digitales Patrocinadas por el Estado
Pichai también abordó el papel de las iniciativas de activos digitales patrocinadas por el estado, incluido un sistema de distribución de bonos basado en blockchain denominado “G-Tokens.” El sistema está diseñado para permitir la propiedad fraccionada de bonos gubernamentales, apuntando a inversores minoristas y mejorando la accesibilidad de los instrumentos de deuda soberana.
Este proyecto sigue al anuncio del 13 de mayo del Ministerio de Finanzas sobre la emisión de $150 millones en tokens de inversión digital - un piloto diseñado para diversificar los canales de financiación gubernamentales y probar la viabilidad de instrumentos de deuda pública tokenizados. Estos movimientos forman parte de un esfuerzo más amplio por digitalizar la emisión y negociación de productos financieros, reflejando un interés global creciente en el uso de blockchain para la infraestructura de los mercados de capitales.
El impulso de Tailandia hacia la tokenización también se alinea con el anuncio de febrero de la SEC de Tailandia sobre una plataforma dedicada al comercio de valores tokenizados - inicialmente dirigida a participantes institucionales. Estos movimientos sugieren una estrategia por fases: comenzar con iniciativas respaldadas por el estado y entornos de alta confianza, luego expandirse gradualmente a casos de uso más descentralizados y de mercado abierto.
Stablecoins Aprobadas para Listados en Intercambios
A principios de este año, Tailandia hizo otro ajuste regulatorio que podría allanar el camino hacia una adopción más amplia de criptomonedas. En marzo, la SEC de Tailandia aprobó USDT de Tether y USDC de Circle para uso en el comercio de criptomonedas. Estas stablecoins vinculadas al dólar estadounidense pueden ahora ser listadas en intercambios tailandeses regulados, brindando a comerciantes y proveedores de liquidez acceso a sustitutos digitales de dólares ampliamente utilizados.
La aprobación es un reconocimiento práctico del papel de las stablecoins en los mercados de criptomonedas - tanto como pares de negociación como para rampas de entrada y salida. Aunque los reguladores globales siguen cautelosos ante las implicaciones sistémicas de las stablecoins, el movimiento de Tailandia refleja una aceptación medida de su utilidad en un entorno de intercambio controlado.
Sin embargo, no hay indicaciones actuales de que las stablecoins aprobadas se usarán en el próximo sistema de pagos para turistas. Ese sistema parece más probable que dependa de infraestructura de conversión en el backend, posiblemente a través de intermediarios cripto-fintech con licencia o soluciones de custodia lideradas por bancos que minimizan la volatilidad y riesgos de cumplimiento.
Turismo se Encuentra con la Tecnología Financiera
El giro de Tailandia hacia los pagos con criptomonedas en el sector turístico refleja una tendencia más amplia en la región, donde las naciones están experimentando con activos digitales como parte de sus estrategias de recuperación económica y modernización post-COVID. El sudeste asiático sigue siendo una de las regiones más activas en cripto del mundo, con alta penetración móvil y acceso creciente a billeteras digitales.
Al habilitar el gasto en criptomonedas para turistas, Tailandia espera atraer a un nuevo demográfico de viajeros expertos en tecnología al tiempo que experimenta con la innovación en pagos en un entorno de prueba cuidadosamente controlado. Sin embargo, el éxito de la iniciativa dependerá no solo de la infraestructura backend y la claridad regulatoria, sino también de la experiencia del usuario, las tarifas de conversión y la disposición de los comerciantes - factores que han obstaculizado esfuerzos similares en otros países.
También hay consideraciones monetarias y geopolíticas. Al permitir el gasto en criptomonedas a través de sistemas intermedios que evitan la interacción directa con el baht, el gobierno puede probar las aguas sin comprometer los controles de capital o invitar a la volatilidad cambiaria a corto plazo. En este sentido, el modelo cripto-turístico de Tailandia representa un enfoque híbrido - ni completamente abierto ni enteramente restrictivo - alineado con la postura cautelosa pero activa del país sobre la adopción de activos digitales.
Reflexiones Finales
Aunque el abrazo de Tailandia a las criptomonedas en el turismo y su reforma regulatoria financiera indican intenciones progresistas, el equilibrio entre fomentar la innovación y mantener la estabilidad financiera sigue siendo delicado. Los cambios propuestos, desde pagos turísticos hasta la reforma de la inversión institucional, apuntan hacia un enfoque liderado por el estado y centrado en la infraestructura hacia las finanzas digitales, un modelo que puede atraer a otros mercados emergentes que buscan modernizarse sin ceder el control.
Aún así, el camino por delante incluye desafíos no resueltos: implicaciones fiscales del gasto en criptomonedas, cumplimiento transfronterizo, licencias regulatorias para intermediarios e integración técnica a través de la infraestructura financiera. A medida que los esquemas piloto se despliegan y las reformas legales evolucionan, su éxito dependerá de la coordinación entre reguladores, instituciones financieras y socios globales.
Los planes de Tailandia pueden no llevar a una transformación inmediata, pero reflejan una recalibración global más amplia en la forma en que los gobiernos abordan las criptomonedas, no solo como una clase de activos, sino como una herramienta de pago, una capa de infraestructura y una palanca política en un panorama financiero en constante cambio.