Se espera que el Senado de EE.UU. apruebe la Ley GENIUS tan pronto como la próxima semana, estableciendo el primer marco regulatorio integral del país para stablecoins, según fuentes familiarizadas con la legislación. El cineasta e inversionista ángel, Paul Barron, citando contactos directos en Washington, indicó que el proyecto de ley emblemático podría redefinir el futuro de la innovación en criptomonedas en Estados Unidos.
Qué saber:
- La Ley bipartidista GENIUS fue presentada en marzo de 2024 por las senadoras Kirsten Gillibrand (D) y Cynthia Lummis (R)
- La legislación tiene como objetivo crear regulaciones claras para las stablecoins mientras apoya la innovación
- La senadora Elizabeth Warren está trabajando para retrasar o bloquear la aprobación del proyecto de ley
Claridad regulatoria para el mercado de divisas digitales
La Ley GENIUS, formalmente titulada "Guiando y Empoderando a la Nación para la Innovación en Stablecoins de EE.UU.", representa un paso significativo hacia la legitimación de las operaciones de criptomonedas dentro de Estados Unidos. Introducida el año pasado por Gillibrand y Lummis, la legislación busca establecer directrices regulatorias inteligentes que protejan el sistema financiero mientras fomentan la innovación en el espacio de activos digitales.
"Este proyecto de ley podría facilitar que los proyectos innovadores crezcan en EE.UU., sin tener que mudarse al extranjero," señaló Barron en su análisis de la legislación pendiente.
El momento se alinea con la estrategia económica más amplia del presidente Donald Trump para posicionar a América como líder mundial en finanzas digitales.
Las stablecoins, criptomonedas diseñadas para mantener un valor consistente al indexarse a activos de reserva como el dólar estadounidense, han experimentado un crecimiento explosivo en los últimos años como mecanismos de transacción, vehículos de inversión y reservas de valor. La rápida expansión del mercado ha subrayado la necesidad de una intervención regulatoria para garantizar la estabilidad y la protección del consumidor.
La legislación aborda una industria de criptomonedas que ha operado en ambigüedad regulatoria durante años. A pesar de enfrentar varios obstáculos y retrasos relacionados con preocupaciones sobre conflictos de intereses e impactos potenciales en el mercado, el apoyo bipartidista del proyecto refleja un consenso creciente sobre la necesidad de regulación de stablecoins.
Democratizando la innovación financiera
Lo que distingue a la Ley GENIUS de intentos regulatorios anteriores es su potencial para nivelar el campo de juego financiero. Las pequeñas empresas, los inversores minoristas y las startups emergentes de blockchain— a menudo desfavorecidos en el entorno regulatorio actual— se beneficiarían más del marco propuesto.
Al eliminar la incertidumbre regulatoria, la legislación podría crear condiciones para que los pequeños innovadores compitan más efectivamente con las instituciones financieras establecidas. Esta democratización de oportunidades resuena con los partidarios que ven el sistema actual como desproporcionadamente favorecedor de grandes entidades a expensas de los participantes más pequeños.
La aprobación del proyecto sería un momento crucial para la regulación en criptomonedas de EE.UU.
Al establecer directrices claras para las stablecoins, se propone aportar legitimidad y estabilidad a un sector criticado frecuentemente por su volatilidad y riesgo.
Los defensores argumentan que la legislación encuentra un equilibrio adecuado entre proteger a los consumidores y fomentar la innovación. Los interesados de la industria sugieren que reglas claras podrían acelerar el desarrollo al proporcionar certeza sobre los requisitos de cumplimiento.
Oposición y división política
A pesar de sus orígenes bipartidistas, la Ley GENIUS enfrenta una oposición significativa. La senadora Elizabeth Warren y sus aliados están trabajando activamente para impedir el progreso del proyecto, reflejando divisiones persistentes en Washington respecto a la regulación de monedas digitales.
Warren ha abogado consistentemente por una supervisión más estricta del sector de criptomonedas, expresando preocupaciones sobre la protección del consumidor, la estabilidad financiera y el uso ilícito. Su resistencia destaca la división ideológica en curso entre los legisladores, con algunos que abrazan la innovación financiera digital, mientras otros recurren a enfoques regulatorios más restrictivos.
En muchos aspectos, la Ley GENIUS implica elementos que fueron criticados activamente cuando los proyectos de CBDC estaban sobre la mesa. Por ejemplo, AML/KYC obligatorios (cualquier transferencia significativa debe ser verificada mediante identificación), congelación de transacciones (el Departamento del Tesoro de EE.UU. puede bloquear transacciones sospechosas), control directo sobre las reservas (las stablecoins deben ser respaldadas solo por efectivo, depósitos y bonos del gobierno de EE.UU.), y en general el modelo regulatorio de CBDC —control, informes, transparencia, centralización. Solo sin el nombre de CBDC.
"La resistencia muestra que Washington todavía está dividido," observó Barron en su evaluación sobre las perspectivas del proyecto.
La división subraya el complejo panorama político en torno a la regulación de tecnología financiera en el Congreso actual.
Si se aprueba, la Ley GENIUS establecería un precedente para una legislación futura sobre criptomonedas. Los participantes de la industria seguirán de cerca los avances del proyecto a medida que se acerca a una votación, anticipándose a impactos potenciales en las operaciones y la dinámica del mercado.
Una nueva era regulatoria
La aprobación de la legislación señalaría una nueva era para la regulación de criptomonedas en América, potencialmente alentando la innovación a la vez que proporciona la supervisión considerada necesaria por los reguladores. Los analistas sugieren que el marco podría servir como modelo para otras categorías de activos digitales más allá de las stablecoins.
El proyecto aborda preocupaciones de larga data sobre la claridad regulatoria que han llevado a algunas empresas de blockchain a establecer operaciones fuera de Estados Unidos. Los defensores creen que las directrices claras podrían revertir esta tendencia, trayendo el desarrollo tecnológico y beneficios económicos asociados de regreso a EE.UU.
Al establecer estándares para la emisión y gestión de stablecoins, la Ley GENIUS aspira a mitigar riesgos mientras fomenta una innovación responsable. El equilibrio que traza podría determinar si Estados Unidos emerge como líder o rezagado en el dinámico panorama de finanzas digitales.
Reflexiones finales
A medida que el Senado se prepara para votar sobre la Ley GENIUS, la legislación representa un momento crucial para la regulación de criptomonedas en América. La aprobación del proyecto establecería directrices claras para las stablecoins, mientras potencialmente democratiza la innovación financiera para los participantes más pequeños del mercado.